Todas las versiones de la familia de Windows le permiten organizar accesos directos a componentes del sistema, aplicaciones y documentos en el escritorio de acuerdo con las preferencias del usuario. Cada una de las últimas tres variantes de este sistema operativo ofrece la posibilidad de elegir el mismo conjunto de opciones para organizar iconos; solo existen pequeñas diferencias en la organización del acceso a la configuración correspondiente del sistema operativo.
Instrucciones
Paso 1
Haga clic con el botón derecho en el fondo del escritorio de su sistema operativo. Si este sistema operativo es Windows XP, el menú contextual desplegable contendrá la sección "Organizar iconos". Desplácese sobre él y, en la subsección que aparece, seleccione uno de los comandos para organizar los accesos directos: por nombre, tamaño, tipo de archivo y fecha de modificación.
Paso 2
Marque la casilla junto a "Alinear a la cuadrícula" en la misma sección del menú contextual si desea que Explorer (es responsable del funcionamiento de los elementos del escritorio) alinee los accesos directos estrictamente a lo largo de líneas invisibles de filas y columnas.
Paso 3
Seleccione "automáticamente" en la misma sección si confía en Explorer para organizar los accesos directos como mejor le parezca. En este caso, los iconos se crearán de arriba a abajo y de izquierda a derecha en el orden en que se agregaron al escritorio.
Paso 4
Desmarca la casilla junto a "Mostrar iconos de escritorio" si no quieres que ningún icono cubra la imagen de fondo.
Paso 5
Si está utilizando un sistema operativo Windows posterior, no encontrará la sección Organizar iconos en el menú contextual del escritorio. Los ajustes que definen los criterios para ordenar los accesos directos se colocan aquí en una sección llamada "Clasificación". También hay cuatro opciones en esta sección: por nombre, tamaño, tipo de archivo y fecha de modificación.
Paso 6
Expanda la sección "Ver" del menú contextual del escritorio de Windows 7 o Windows Vista para acceder a las funciones de administración de iconos que se describen en los pasos dos, tres y cuatro. Solo ha cambiado su ubicación en el menú, y el efecto causado al seleccionar la función correspondiente sigue siendo el mismo que se describe en estos tres pasos.