Un caso bastante común cuando una computadora que no tiene protección se convierte en víctima de virus. El usuario cree ingenuamente que al instalar un buen antivirus pagado en su PC, podrá curar sus dispositivos de la infección. Esto no es enteramente verdad.
Por supuesto, un antivirus bien pagado es un muro bastante sólido contra la invasión de malware. Sin embargo, debe recordarse que el programa antivirus ya instalado en la computadora infectada es solo una utilidad inútil. El hecho es que, estando activo, un programa antivirus ocupa la mayor parte de la RAM. Es por eso que el antivirus solo puede dañar algunos archivos del malware, pero no eliminarlo por completo.
¿Por qué? La respuesta es simple: el virus comienza su actividad simultáneamente con el inicio del sistema operativo y hace que los archivos de programas y utilidades en ejecución sean inaccesibles para su eliminación. Tampoco siempre es posible detener procesos innecesarios en el administrador de tareas, ya que hay docenas de ellos y están ocultos con diferentes nombres.
Para tales fines, los asistentes informáticos utilizan discos especiales con un sistema operativo independiente independiente. La infección se trata cuando el sistema operativo infectado está inactivo. La instalación de un antivirus y la limpieza de virus son servicios completamente diferentes y, por regla general, la limpieza cuesta 2 veces más. Para los usuarios normales de Internet, existen utilidades especiales que, cuando se inician desde debajo del sistema, primero simplemente marcan los virus y los eliminan cuando se reinicia la computadora cuando los programas de virus aún no han tenido tiempo de cargar sus archivos en la RAM.