A primera vista, un estereograma es una imagen caótica, pero si lo miras de cerca, puedes ver un objeto tridimensional. Esto no requiere ningún dispositivo adicional, la formación es suficiente.
Instrucciones
Paso 1
Primero, aprenda a hacer un ejercicio similar al que se usa en la gimnasia ocular regular. Enfoque su mirada alternativamente en un objeto ubicado en la distancia, luego en un objeto ubicado a su lado. Entrena los músculos de tus ojos para cambiar tu mirada de un objeto distante a uno cercano al instante y sin dudarlo.
Paso 2
A la distancia de un brazo de tus ojos, coloca dos lápices verticalmente de modo que la distancia entre ellos sea de aproximadamente un centímetro. Dirija su mirada a un objeto distante como a través de ellos. Si te parece que no hay dos, sino tres lápices, estás en el camino del éxito.
Paso 3
Aumente gradualmente la distancia entre los lápices. Cada vez, asegúrese de que su número aparente sea igual a tres y que el lápiz aparente promedio no se duplique. Deje de entrenar cuando pueda obtener este resultado con una distancia entre los lápices de unos diez centímetros.
Paso 4
Ahora coloque el monitor con el estereograma mostrado en su pantalla (o una copia impresa de dicha imagen) a una distancia de los ojos del brazo. Elija una escala para que la distancia entre las secciones repetidas adyacentes tampoco exceda los diez centímetros. Mire a lo lejos, casi sin darse cuenta del estereograma. Pronto verá una imagen 3D del objeto.
Paso 5
Finalmente, consolide la habilidad observando varias docenas de estereogramas diferentes. Tarde o temprano, aprenderá a ajustar sus ojos según sea necesario mirando directamente a la pantalla, en lugar de a un objeto en la distancia. Preste atención al hecho de que cuando mueve la cabeza, es imposible ver la imagen estereoscópica desde diferentes lados; parece moverse con la cabeza. Esta desventaja es inherente no solo a los estereogramas, sino también a los estereopares ordinarios. Finalmente se elimina solo en hologramas.